DRON

El joven, alumno de Diseño Industrial de la Universidad Nacional de Lanús (UNLa), desarrolló un Vehículo Aéreo No Tripulado (VANT) diseñado para asistir tareas de búsqueda y rescate y construido sobre la tecnología de impresión 3D.
Rubén Arismendi, estudiante de la UNLa, desarrolló la idea del “Dron Ar 1.0″ como parte de sus objetivos curriculares, y obtuvo el apoyo de una becade la secretaría de Políticas Universitarias para la construcción del prototipo.

Arismendi le contó a Télam que “la idea comenzó después de analizar los usos originales de los drones, vinculados a lo militar y a la guerra, y en pensar como desde el rediseño uno podía pensar esta tecnología para salvar vidas, colaborando con los rescatistas en emergencias o catástrofes”.

“Comencé con esto hace casi dos años y lo más difícil al principio era encontrar la poca información técnica disponible y la poca experiencia de usuarios que había en el país”, apuntó.

El diseñador afirmó que “a través de un programa del ministerio de Educación pudimos financiar el prototipo, que de otra manera no hubiésemos podido”.

“Los drones civiles que hay hoy en el mercado argentino tienen fines recreativos o comerciales, este es el primero pensado para colaborar en tareas de salvamento”, aclaró el estudiante.

Arismendi subrayó que “uno de los desafíos más grandes tuvo que ver con pensar de qué manera integrar los componentes comunes a todos los drones, como los motores y los cableados internos al diseño nuevo y específico” que tenían.

“Hubo que integrar todo un paquete tecnológico de drones pensados para otra cosa en un diseño propio”, explicó.

“Trabajar con impresión 3D te permite llegar al prototipo de manera relativamente rápida y a un costo accesible. Se evita el proceso de desarrollar varias matrices para ver si el producto funciona, porque hay muchas pruebas que se puede correr sobre el archivo en la computadora”, graficó.

Sin embargo, indicó que “no se puede corroborar mediante software el comportamiento que finalmente va a tener el dron cuando vuele, por eso era fundamental acceder al prototipo”, sostuvo, y resaltó que “ahí es donde la impresión 3D acerca el prototipo sin necesidad de contar con la estructura de una fábrica atrás”.

El estudiante de diseño remarcó que “esta tecnología también permite una gran flexibilidad en el modelado de las formas, trabajando a través de la deposición de capas se puede hacer con mucha precisión las piezas más complejas”.

“Este VANT ya fue analizado por Defensa Civil de la provincia de Catamarca, que pidió sus especificaciones técnicas, y hay algunas dependencias bonaerenses que quieren venir a ver su operatividad. La idea es llevar este prototipo a un modelo de producción serializada de operación sencilla y bajo costo”, adelantó.

“La idea es producirlo a nivel local en series limitadas que incluyan requerimientos de cada cliente, ya no en impresión 3D -porque encarecería el producto-, y poder introducirlo en organismo provinciales y municipales, además de ponerlo al servicio de bomberos y organismos de rescate que en el uso cotidiano sugieran nuevas evoluciones”, concluyó.