Las autoridades de Puerto Madryn han montado un operativo para retirar una ballena Franca Austral varada y muerta de la costa de esa ciudad. La Dirección de Conservación de la Secretaría de Turismo Municipal encabezó la maniobra junto al equipo de trabajo de la Prefectura Naval Puerto Madryn, ya que el animal, varado a la altura de la zanja de guardia, fue trasladado después de habérsele tomado las muestras correspondientes por parte del equipo de Red de Fauna Costera.
El jefe de Guardaparques, Juan Cruses, explicó que la maniobra con Prefectura se inició esperando la pleamar en la zona donde se encontraba la ballena en la playa.
Previamente, los integrantes de Protección Civil Municipal, a cargo de Leonardo Alderete, realizaron un cercado alrededor de la ballena previo a retirar a distintas personas que se congregaron por curiosidad y, de manera irresponsable, tomaron contacto con el animal sin advertir los peligros sanitarios que esto conlleva.
Se trataba de un juvenil de ballena franca austral macho, de algo más de un año, que presentaba lesiones compatibles con enfermedades que pueden ser transmisibles a humanos y canes.
La veterinaria Carla Fiorito explicó que la ballena varada presentaba heridas virales y poxvirus y señalo, además, que ante este tipo de heridas podría tener Erisipela, una bacteria transmisible tanto a humanos como a perros, por ejemplo. Es por ello que ante cada situación similar se pide a la comunidad no acercarse a los animales, informó el Diario Jornada.
Cabe destacar que este tipo de maniobras necesita del profesionalismo del personal de Prefectura Naval Argentina, a cargo del Prefecto Mayor Víctor Hugo Duarte que, con excelente predisposición, lleva adelante cada intervención necesaria.
Desde la Dirección de Conservación se recuerda a la comunidad que, divisado cualquier animal varado en la costa o con un estado débil o lastimado, se debe comunicar rápidamente al 103 para que el mecanismo de trabajo de la Red de Fauna Costera se ponga en marcha y así comenzar con sus correspondientes dispositivos.
Se ruega a la comunidad no acercarse ni molestarlos y mucho menos tocar a los animales que se encuentran en las costas de la ciudad y las playas aledañas. Los animales pueden transmitir enfermedades, pueden estar simplemente asustados o perdidos o lastimados. (Foto / Diario Jornada)
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