El intendente Gustavo Melella dialogó con Radio Fueguina y admitió haber sido amenazado de muerte por miembros de la Iglesia Hijos del Altísimo, que se encuentran usurpando parte de un predio en el barrio Perón II.
Al respecto, indicó que le parece «una locura» lo que ocurre en la Iglesia, ubicada en el Pasaje Esperanza y que ya cuenta con un prontuario amplio, y explicó que «así no se comporta un grupo religioso».
Pero lo más preocupante es que el propio Intendente de la ciudad confesó que tanto él como sus funcionarios fueron amenazados por los integrantes del grupo religioso: «Si esto sigue así, la sangre va a correr sobre mí», confesó que le dijeron.
Por ello, confió que la Secretaría de Seguridad dispuso una consigna policial para salvaguardar su persona, aunque en las últimas horas ha pedido que la misma se retire.
Además, resaltó que «son como cualquier ocupa, ponen a los chicos por delante» y criticó el no acatamiento de las ordenes que dictó la Justicia de frenar las obras que afectan terrenos lindantes.
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