La decisión de Eduardo Amadeo de dejar la alianza Compromiso Federal para integrar el Frente Renovador que encabeza Sergio Massa no tuvo influencia en el electorado. Es que su lista fue la más votada entre las tres boletas que compitieron en esas elecciones internas, a pesar de que ya no integra más la agrupación.
Sorpresivamente, la lista interna de Amadeo “Es posible” obtuvo 33.417 votos, lo que es igual al 33,38% de los sufragios en la disputa electoral partidaria. Sus rivales inmediatos eran los dirigentes piqueteros del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD), Nina Pelozo y Raúl Castells, por la lista «Justicia y Dignidad»; José Tagliafico, por parte de «Es posible Buenos Aires»; y Unir, impulsada por Zulma de Angelis.
El triunfo testimonial, sin embargo, no le hubiese alcanzado a Amadeo para pasar hacia los comicios de octubre, ya que la suma de todas las listas fue del 1,15%, muy por debajo del piso mínimo.
A inicios de agosto, mientras sus spots seguían difundiéndose por la televisión, Amadeo bajó su precandidatura por la lista de los hermanos Alberto y Adolfo Rodríguez Saa y se integró al Frente Renovador, que lidera el intendente de Sergio Massa, porque no quería «ser funcional al Gobierno».
El pase del legislador al espacio del tigrense se produjo demasiado tarde, ya que la Justicia Electoral no llegó a tiempo para retirar sus boletas del cuarto oscuro en las elecciones primarias. Los resultados de Amadeo pusieron de manifiesto el nutrido grupo de despistados que lo votaron, sin saber que sus sobres beneficiaban a aquellos precandidatos que ocuparon los siguientes lugares en la lista.
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