«Las personas se amontonan, viven en la precariedad y sin los servicios básicos», explicó Silvia Rosso al referirse a la condición hacinada en la que viven los vecinos de la Margen Sur. Esto, explicó, «incide en la salud, en la condición física e incluso en el diario convivir de los niños con sus compañeros de escuela. Todos estos son factores de vivienda digna».
Respecto a las tierras, resaltó que «no hay herramientas o instrumentos legales para que la gente pague de a poco los terrenos y el Gobierno vaya invirtiendo en nuevas tierras». Asimismo, indicó que se están presentado servicios de agua y leña de manera gratuita «a gente que está trabajando en fábricas», y destacó que esto debe modificarse, ya que «hay que ser solidario».
De todas maneras, la Coordinadora de Gabinete aclaró que de las 8 mil personas que residen en la zona, «el 30% está en una situación muy vulnerables».
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