Una auténtica devolución de gentilezas. El año pasado, Paul McCartney se propuso grabar un disco dedicado al cancionero de entreguerras que sonaba en su casa durante la niñez. No fue un acercamiento superficial: recorrió el songbook americano en busca de perlas escondidas, compuso dos piezas en esa dirección, se metió en los legendarios estudios Capitol y convocó a un ensamble con swing jazzístico liderado por Diana Krall. Uno de los pocos y grandes invitados de Kisses on the bottom fue –justamente- Eric Clapton: un camarada generacional que había crecido en el mismo país y bajo los mismos influjos. Ahora, cuando el propio Clapton acaba de anunciar la salida de su disco de standards y canciones nuevas, ya pueden adivinar quién es el invitado central.
Si. Paul McCartney se encarga de cantar y tocar el bajo en “All of me” en el inminenteOld Sock, primer trabajo de Clapton para el sello independiente Surfdog Records. Además de aquella pieza popularizada por Billie Holliday y dos canciones nuevas («Every Little Thing» y «Gotta Get Over»), el repertorio también apunta creaciones de Ray Charles, Otis Redding, Leadbelly, Gary Moore y otros clásicos del blues, el jazz y el folk americano. Como explicó en su site oficial, Old Sock reúne esos temas favoritos “desde su infancia hasta el presente, que recalcan su gran aprecio y conocimiento de la música”. Para subrayar esa dirección, los otros grandes invitados son dos viejos camaradas: Stevie Winwood y J. J. Cale, Chaka Khan y el baterista Jim Keltner.
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