(Río Grande, 09 de noviembre de 2012) – A raíz de la aparición de una treintena de canes muertos, posiblemente envenenados, en la zona de los asentamientos de la Margen Sur, el Municipio de Río Grande abrió una investigación.
Así lo confirmó el subsecretario de Gobierno, Alfredo Ballarini, quien manifestó que “nos alertaron hoy a la mañana (por este viernes) sobre la existencia de perros muertos y tomó intervención la gente de Zoonosis y no sabemos a qué se debe”.
Agregó que “vamos a iniciar una investigación en la zona por qué fue la matanza, si hay algún responsable, porque no sabemos a qué se debe”.
Ballarini explicó que en estos casos se sigue todo un proceso administrativo que ya se inició a través de la Coordinación de Zoonosis, y luego se tratará de determinar el tipo de veneno que fue ingerido por estos malogrados animales.
“No sabemos aún de qué sustancia se trata ni cómo fueron consumidos por los animales, si fue en alguna comida que se les tiró o bien está en el agua o en algún otro lugar que puede llegar a contaminarla. A partir de determinar esto, sabremos como actuar con la gente”, dijo el funcionario.
El funcionario municipal recordó que Río Grande es una ciudad que no practica la eutanasia y que además tiene una política de control poblacional de canes a través de diversas acciones, como la esterilización.
“Nosotros como municipio estamos sujetos a las normativas vigentes, estamos tratando de implementar algún tipo de solución para lo que es el maltrato animal; así que jamás podríamos llegar a llevar a cabo algún tipo de acción como esta”.
Por último, el Subsecretario de Gobierno insistió en que “se van a investigar los hechos, se van a hacer las autopsias correspondientes para determinar en primer término, cuál fue el factor que desencadenó la muerte de estos animales”.
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