(Río Grande, octubre 31 de 2012) – La Cámara de Diputados de la Nación convirtió esta madrugada en Ley el proyecto que dispone la construcción de la ruta 40 en el tramo fueguino y ordena la realización de estudios técnicos para el cruce del Estrecho de Magallanes por aguas argentinas.
El proyecto, que lleva la firma del fallecido senador fueguino José Martínez (ARI), contó con el con el aval de 131 votos y no tuvo oposición. Cabe destacar que a la hora de la votación, los cinco representantes de Tierra del Fuego estuvieron presentes.
Con dictamen favorable de las tres comisiones que lo debatieron previamente, la iniciativa fue definitivamente sancionada esta madrugada.
El proyecto, define como “política de estado la conexión vía terrestre y marítima del territorio continental de la República Argentina con su territorio insular de la provincia de Tierra del Fuego”.
En el artículo segundo, dispone la continuación de la ruta nacional Nro 40 a lo largo de la isla y fija el mojón kilométrico cero en el extremo austral de Tierra del Fuego. A la vez, ordena realizar los estudios técnicos de viabilidad respecto de la traza de la ruta 40, estableciendo que deberá comunicar a las dos grandes de la provincia: Río Grande y Ushuaia. Otorga finalmente, un plazo de no más de 210 días para el llamado a licitación de la obra.
Respecto de la conexión marítima entre Santa Cruz y Tierra del Fuego, determina que se hará a través del sistema conocido como «Roll-on Roll-off», previo efectuar los estudios técnicos de factibilidad económica. El cruce deberá unir Punta Dúngenes (Santa Cruz) con Cabo Espíritu Santo (Tierra del Fuego).
Un largo camino
El proyecto que finalmente fue aprobado en Diputados ha sido iniciado en 2010 bajo el Nro. de expediente 13-S-11, denominado “INTEGRACIÓN FÍSICA DEL TERRITORIO CONTINENTAL CON SU TERRITORIO INSULAR DE LA PROVINCIA DE TIERRA DEL FUEGO, ANTARTIDA E ISLAS DEL ATLÁNTICO SUR. DEFINICIÓN COMO POLÍTICA DE ESTADO”
Fue presentado en 2010 por el senador del ARI fueguino José Martínez e incorporó posteriormente las firmas de veinticuatro legisladores de todas las bancadas, en representación de la mayoría de las provincias.
El 30 de marzo de 2011 recibió media sanción del Senado, después de haber recalado en las comisiones de Infraestructura, Vivienda y Transporte y Presupuesto y Hacienda.
Girado a Diputados, el proyecto conocido como “Cruce por aguas argentinas” obtuvo dictamen favorable en las comisiones de Transportes, Intereses Marítimos, Fluviales, Pesqueros y Portuarios y Presupuesto y Hacienda. Sin objeciones que se hayan hecho conocer hasta el momento.
El proyecto recibió sanción definitiva esta madrugada en una sesión que marcó otro jalón histórico para los fueguinos.
De interés oficial
El proyecto de cruce por aguas argentinas será declarado por Ley política de Estado, lo que le daría continuidad y decisión política a la obra, más allá de las dificultades que presenta y el meduloso análisis técnico que requiere.
Esa decisión del gobierno nacional, que se plasmó en la Ley y que fue sancionada anoche sin objeciones, la Cámara de Diputados, fue anticipada hace más de cuatro años a Radio Fueguina por un alto funcionario nacional.
En efecto, en entrevista exclusiva con la Radio, efectuada en enero de 2008, el subadministrador General de Vialidad Nacional, ingeniero Julio Ortiz Andino, daba detalles del proyecto que se analizaba en la órbita del gobierno federal, coincidente en casi su totalidad con lo plasmado en el proyecto de Ley que se aprueba cuatro años y medio después..
“El Jefe de Gabinete (Alberto Fernández) está muy interesado en la conexión Argentina-Argentina”, se animaba Ortiz Andino. “Hoy en Santa Cruz se está trabajando en el proyecto de llegar (con el pavimento y obras conexas) por la ruta 40 hasta Punta Dungeness, que sería el punto de unión y nosotros estamos llamando a licitación el proyecto en Tierra del Fuego de la continuidad de la ruta 3 hasta Hito 1, unos ochenta kilómetros que se deberían pavimentar”.
“El tramo fueguino se encuentra en etapa de estudio de factibilidad, aunque la Universidad de la Patagonia Austral lleva varios años analizándolo. Luego de terminado el pre-proyecto, que lleva además el requerimiento de un completo estudio de impacto ambiental, estaría todo dispuesto para dar vía libre a una compleja obra que, además, cuenta con el apoyo del Banco Interamericano de Desarrollo que, según se dice, aportaría no menos de 250 millones de dólares para el emprendimiento”, sorprendía por entonces el funcionario.
La puesta en condiciones del tramo fueguino, advirtió Ortiz Andino, “Va a ir atado al proyecto de pavimentar en Santa Cruz y salir adelante con la unión marítima”. Esta última es la más compleja, la más cara y la que requiere un amplio y concienzudo estudio, considerando que se requiere de naves adecuadas para la zona y las condiciones geoclimáticas, además de la construcción de sendas terminales portuarias en ambos extremos del empalme marino.
Respecto de las barcazas que harían el traslado, “Se habla de un tipo de barcaza que se utiliza en el norte de Europa y que demoraría una hora y media en completar el trayecto”.
En relación a los puntos extremos, los técnicos parecen coincidir en que la traza debería ir desde una zona de playa ubicada entre Punta Dungeness y Cabo Vírgenes (en el extremo austral de Santa Cruz) hasta Cabo Espíritu Santo, (en el vértice boreal de la Isla). Con estos posibles emplazamientos se está en un rango de travesía de entre 21 y 24 millas náuticas (39 a 44 Km), trayecto que insumiría entre una y media y dos horas y media de navegación, según la nave utilizada. Ese tiempo, describió el propio Ortiz Andino “se aprovecharía en gran parte, porque los trámites aduaneros (que hoy se realizan en los puesto fronterizos) se harían a bordo de la barcaza”.
Los plazos estimados en aquel entonces se han estirado sensiblemente, claro está. Pero lo cierto es que con una ley sancionada y una decisión política de la que nadie duda ya, el anhelado cruce por aguas argentinas parece entrar en un camino de definiciones esperanzadoras.
Comentarios