En los cinco primeros meses de meses de 2012, el déficit de Aerolíneas Argentinas marcó un nuevo récord desde que está bajo la órbita estatal: demandó un subsidio de $13,07 millones por día, 64,7% más respecto al año anterior.
A partir de 2011 la línea aérea demandó cada vez mayor ayuda estatal para hacer cerrar sus cuentas. El ejercicio 2010 mostró una pérdida de $5,32 millones diarios, mientras que en 2011 pasó a $7,32 millones. El año pasado la justificación fue la merma de pasajeros por el impacto de la erupción del volcán Puyehue, pero ahora la tendencia continúa.
La cifra total que el Ministerio de Planificación envió a la línea aérea entre enero y mayo fue $1.935.648.668,47, de los cuales casi siete de cada diez pesos fueron a pagar sueldos y cargas sociales del personal. Los datos surgen de tres pedidos de accesos a la información pública a la Secretaría de Transporte y la empresa que realizó LA NACION.
En otras palabras, en 2011 el Estado dispuso $481 por cada pasajero que abordó un vuelo de la línea aérea de bandera; mientras que para este año este guarismo ascendería en torno a $720, de acuerdo a las estimaciones sobre datos económicos actuales de dos analistas del mercado aeronáutico local consultados por este medio.