Finalmente, luego de más de siete meses, Bariloche volvió hoy a recibir vuelos comerciales. El aporte de tecnología para la medición de densidad de cenizas por parte de la empresa privada LAN, y la promesa del Ministerio de Defensa de la Nación de instalar modernos equipos a partir del 31 de enero, permitió a las aerolíneas reiniciar los vuelos a la ciudad.
A las 13,44 horas el vuelo 1682 de Aerolíneas Argentinas aterrizó en el Aeropuerto Internacional de Bariloche, transportando unos 120 pasajeros, de los cuales 80 bajaron en la ciudad, mientras que el resto siguió viaje hasta Esquel.
El gobernador de la provincia, Alberto Weretilneck, encabezó una comitiva de funcionarios que se trasladó al Aeropuerto para recibir el primer vuelo, en el que se esperaba que viaje el ministro de Turismo de la Nación, Enrique Meyer. Finalmente el funcionario no subió al vuelo, y en su reemplazo llegó la subsecretaria de Promoción Turística, Patricia Vismara, quien calificó la jornada como “un punto de inflexión” para Bariloche. “Es un día muy especial para la ciudad, y para la recuperación del destino” turístico, aseguró consultada por ANB.
Weretilneck por su parte consideró que a partir de la instalación del equipamiento “no habrá motivo técnico para que aerolínea alguna se vea impedida de volar”, y auguró el “comienzo de la recuperación” de la localidad. Informó que a partir de la próxima semana habrá vuelos diarios, y que la empresa CVC ya confirmó 11 vuelos semanales directos entre San Pablo y Bariloche, desde el mes de junio. En caso de confirmarse, se trataría de la recuperación del mercado emisor brasilero, clave para la actividad turística barilochense, fundamentalmente el segmento hotelero de 4 y 5 estrellas.
El equipamiento que se instalará permitirá la “medición láser” de la altura de la pluma de ceniza, así como su granulado y espesor. El sistema se llama “Lidar”. En tanto, se incluirán dos globos aerostáticos ubicados a 4 mil metros de altura que otorgará, según el ministro de Turismo de Río Negro, Ángel Rovira Bosch, “previsibilidad” al comportamiento de la nube de cenizas. Finalmente, el equipo “Topaz” informará sobre el comportamiento del material volcánico en superficie.
Rovira Bosch, aseguró ante la pregunta de ANB que “debe consultarse a la gestión (provincial) anterior” por qué no se tramitó antes esta solución. (ANB)