El comandante Hugo Wegner de la Gendarmería Nacional, a cargo del Paso Integración Austral, confirmó que el movimiento fronterizo fue muy “intenso”, al punto que hubo momentos en que la cantidad de autos hizo colapsar la ruta que une al puesto argentino con el chileno.
“Ya sobre la tarde del viernes hubo una gran oleada de personas que vino desde Chile hacia Río Gallegos, algo que se volvió a repetir el sábado”, indicó el gendarme, en tanto que confirmó que “gran cantidad de personas, tanto de Chile como de Tierra del Fuego, también registraron paso hacia Chile el sábado”.
El domingo, el flujo de ciudadanos chilenos que cruzaban la frontera hacia esta ciudad capital para presenciar el evento del Turismo Carretera siguió siendo intenso y sobre la última hora comenzó el regreso, tanto hacia Chile como a Tierra del Fuego.
El gran regreso de los argentinos hacia Río Gallegos se dio en la jornada de ayer, indicó el titular del Paso Fronterizo.
El sábado entraron y salieron alrededor de 5 mil personas, el domingo también y durante el día viernes, como el lunes, fueron alrededor de 3 mil las personas que realizaron su control migratorio.
A la hora de evaluar el funcionamiento del sistema “codo a codo”, que comenzó a implementarse a principios de mes y que vivió su gran prueba de fuego este fin de semana, comentó: “El sistema funcionó, lo que pasa es que fue mucha la cantidad de gente, sobre todo a la hora de apertura del paso, se juntaban las filas de personas que iban hacia Chile con las que venían hacia la Argentina y en algunos momentos la ruta colapsaba por la gran cantidad de autos”.
Durante el día, “el flujo fue constante y es cierto que hubo filas importantes para hacer los controles migratorios”, dijo el gendarme y reconoció que “hubo ciudadanos que mostraron su fastidio por esto y algunos decidieron desistir de hacer el viaje, sobre todo de los argentinos”.
Sobre cosas a resolver, Wegner insistió en que “la verdad es que fue muchísima la gente” que pasó, la cantidad le hizo recordar a lo que fue el fin de semana largo del 24 de marzo y sostuvo que el número de gente era tan alto que “por más que agrandáramos el paso, iba a quedar chico igual”, sostuvo.
Dijo que durante esta fecha trabajó la totalidad del personal asignado al paso y ejemplificó que “para que se den una idea, cuando el paso abrió, a las 8 de la mañana, ya eran más de 100 los vehículos que esperaban para cruzar. Y por más que yo tenga 10 gendarmes atendiendo, el trámite se demora igual”.
Por otra parte, respecto de posibles accidentes, el comandante del paso indicó que afortunadamente “no se registró ninguno, los días fueron lindos, pese a que a la mañana había un poco de niebla, pero nada más”, señaló.
Sobre si fueron más argentinos o más chilenos los que cruzaron la frontera, el comandante Wegner sostuvo que fue “un ida y vuelta, realmente, tanto desde como hacia Punta Arenas”.
Finalmente, ratificó que entre entradas y salidas, “fácilmente 15 mil personas se movieron por el Paso Integración Austral”, al tiempo que pidió disculpas por las demoras que ocurrieron, pero manifestó que se hizo “todo el esfuerzo posible” para que sean lo menor posible.
(Fuente textual: diario La Opinión Austral – Río Gallegos)