(Buenos Aires, octubre 5, 2011/AFP) -El fraude en el comercio electrónico y el robo de información confidencial (“phishing”) a bancos supera los 93.000 millones de dólares por año en América latina, se informó el miércoles en una reunión de proveedores y operadores de Internet (Lacnic) que sesiona en Buenos Aires.
Brasil, México y Argentina son los países más afectados, según este primer informe sobre ciberdelito en Latinoamérica, presentado en las sesiones de la XVI reunión anual del Registro de Direcciones de Internet para América latina y Caribe (Lacnic, según sigla en inglés).
“La magnitud del cibercrimen en América latina es realmente preocupante, con escenarios muy probables de ataques cibernéticos y consecuencias gravosas para la población que ya suma costos de ‘phishing’ para los bancos superiores a los 93 mil millones de dólares por año”, señaló la investigación.
El estudio es el primero en su tipo para la región y realizado con el apoyo del Proyecto Amparo de Lacnic.
“Las amenazas son más complejas y sofisticadas. Se ha conformado un modelo de negocio delictivo ampliamente explotado a través de Internet, alimentando una economía clandestina que crece exponencialmente día a día”, dijo Patricia Prandini, quien elaboró el estudio junto con Marcia Maggiore.
El estudio de las investigadoras señaló que “los delincuentes explotan las debilidades de las tecnologías, los vacíos en la legislación y la falta de concientización de los usuarios”.
Se agregó que los ciberdelincuentes se abusan con “el alcance global de Internet y su rápida expansión”.
“A ese panorama se agrega la facilidad con que pueden en Internet borrarse las evidencias y las dificultades para identificarlas cuando se carece de especialistas o no se cuentan con las herramientas adecuadas”, se añadió.
Además, “la desmaterialización de las fronteras nacionales es otro punto que juega a favor del cibercrimen, porque habilita al delincuente a acceder a su blanco sin prácticamente moverse de su silla, a miles de kilómetros de sus eventuales víctimas”.
“Adicionalmente -se agregó en el estudio- el delincuente puede utilizar distintos caminos y recorridos en su afán de dificultar cualquier rastreo”.
El encuentro de Lacnic sesiona en un hotel céntrico hasta el viernes.