(Río Grande, 09 de octubre de 2011) – Grandes demoras hubo en los complejos fronterizos de San Sebastián, donde los trámites migratorios se convirtieron, otra vez, en una forma de tortura hacia los viajeros que pretenden entrar o salir de la Isla.
Durante la jornada del sábado, la coincidencia del feriado largo y la carrera de TC en Río Gallegos motivaron la previsible salida de miles de fueguinos, que debieron comprobar que, a pesar de todas las promesas, los sistemas de atención al viajero siguen siendo lentos y obsoletos y que no se refuerza la atención cuando se avecinan fechas claves.
Largas filas de automóviles se observaron este sábado cuando vecinos de Ushuaia y Río Grande quisieron aprovechar el feriado largo y salir de la provincia. La espera a la intemperie, de los turistas obligados a hacer colas interminables para acceder a los puestos de atención, llevó hasta cinco horas en el sector chileno de San Sebastián y tres horas del lado argentino.
El promocionado sistema “codo a codo” no estuvo a la altura de los acontecimientos, no aportó novedades y las esperas fueron tan largas como siempre, o más. “Salimos de Río Grande a las diez de la mañana y llegamos ya entrada la noche a Punta Arenas, es terrible lo que pasamos”, refirió a Radio Fueguina, Osvaldo Gomez, un vecino de Río Grande que intentó aprovechar el fin de semana largo para descansar en territorio chileno.
Según pudieron comprobar los viajeros, en San Sebastián chileno no había personal extra apostado para afrontar la mayor demanda que sobrepasó largamente su capacidad de operación.
Lo insólito es que todo ello ocurre a pocos días de que un grupo numeroso de funcionarios argentinos hicieran anuncios altisonantes acerca de las ventajas del “nuevo sistema” de atención en frontera. Sistema que, si cambió, lo hizo para mal y en perjuicio de los sufridos fueguinos que intentan emprender el viaje por tierra.