Hebe de Bonafini volvió a arremeter con dureza contra Sergio Schoklender y contra los diputados que ayer lo citaron para que amplíe sus denuncias en el Congreso.
«Schoklender está atrapado sin salida, ya no sabe más que hacer, ni qué mentir, ni qué agregar, miente, miente y miente asquerosamente», lanzó la presidenta de la Fundación Madres de Plaza de Mayo en declaraciones a radio Continental.
Además, Bonafini aclaró que ayer, cuando dijo que el Congreso era un » nido de ratas » no se refirió a todos los diputados y senadores, sino sólo a quienes convocaron a Schoklender para que dé explicaciones ante dos comisiones de la Cámara de Diputados.
«Yo no quise decir que el Congreso todo era [un nido de ratas], sino los que se reunieron ayer, los que convocaron a Schoklender. Me pareció de una bajeza total. La oposición no tiene proyecto y lo único que le interesa es embarrar cada vez más todo», disparó.
En otro tramo, Bonafini aseguró que «nunca tuvimos una cuenta en Miami. Al principio, principio Emilio Mignone nos había sacado para que nos depositaran 10.000 dólares. Pero fue en 1978. La tuvimos un tiempo, pero no sé qué pasó después, si se cerró o qué» » y añadió «tuvimos sí en París para que nos depositaran el mismo premio que les dieron a las Abuelas ahora. Necesitamos abrir la cuenta para no traerlo porque en esa época era peligroso. Tenemos todos los papeles. Creo que quedan 300 pesos».
«Tercer parricidio»
También el abogado de Madres, Eduardo Barcesat, acusó a Schoklender. «Está intentando su tercer parricidio», afirmó cuando le preguntaron por las irregularidades en el manejo de fondos públicos por los que la Justicia investiga al ex apoderado de la entidad.
«Hebe ha sido defraudada y traicionada. Esto es lo que la Justicia tiene que investigar. Yo no quiero ser instrumento de manipular la historia de las Madres de Plaza de Mayo en función de los dichos de un doble parricida que ahora está intentando su tercer parricidio», dijo Barcesat a radio Continental cuando le preguntaron por la relación de estrecha confianza que unió a Schoklender con Bonafini hasta que estalló el escándalo.
Además, Barcesat cuestionó que dos comisiones de Diputados hayan recibido ayer al ex apoderado de Madres para que amplíe sus denuncias. «Creo que cuando se interfiere en un proceso judicial se desvirtúa la tarea de las instituciones», opinó.
No obstante, tomó distancia de las expresiones de Bonafini, que ayer describió al Congreso como «un nido de ratas». Defendió, sin embargo, su derecho a expresarse de ese modo.
«Jamás denominaría ratas o víboras a la gente del Congreso. Lo que ocurrió ayer desmerece las instituciones, pero jamás los describiría así. Cada uno tiene su estilo y su forma de denominar. Yo no voy a pretender unir semánticas», dijo.
De todas formas, volvió a cuestionar la convocatoria. «No se puede hacer un show mediático en el Congreso para darle algún rasguño al Gobierno o a la política de derechos humanos. Se tiene que hacer la pericia contable».
Y concluyó: «La palabra autorizada es la de la Justicia, pero yo creo que hubo una malversación y un desvío de fondos para enriquecimiento de Schoklender. Esa es nuestra hipótesis».
Las denuncias
Ayer, ante las comisiones de Asuntos Constitucionales y de Vivienda de la Cámara de Diputados, Shoklender denunció que el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, le transmitió, por medio de un funcionario de la Secretaría de Inteligencia (SI, la ex SIDE ), que después de las elecciones presidenciales de octubre la causa en la que él está imputado por malversación de fondos públicos se iba a paralizar y que, por esa razón, le convenía desistir de su afán de ser indagado por la Justicia.
Sin nombrarlo, Schoklender apuntó a Fernando Pocino , director de Reunión Interior de la SI, como el emisario que le transmitió el mensaje. «Quedate tranquilo, no te preocupés que Aníbal no se olvida de los amigos… No insistás en que te indaguen. Después del 23 de octubre [día de las elecciones nacionales] el caso se pincha», habrían sido las palabras de Pocino, según relató el ex apoderado de Madres. El encuentro se realizó después de las primarias de agosto en un bar cercano a su domicilio, según relató Schoklender