Según indicaron fuentes judiciales, durante la reconstrucción que se llevó a cabo en el paisaje serrano salteño, participaron Daniel Vilte, Ricardo Vera y Gustavo Lasi, además del juez de la causa, Martín Pérez, a cargo del juzgado de Instrucción Formal.
En plena reserva natural, Vera -custodio de un country cercano a la quebrada- y Vilte, un baqueano de la zona, le reprocharon a Lasi, quien se desempeñaba como guía turístico en el lugar, que los haya acusado ante la Justicia cuando dio su declaración indagatoria.
Incluso Lasi, en plena reconstrucción, reconoció la violación contra una de las víctimas, algo que no había sucedido anteriormente, ya que implicó a Vilte y Vera en ese punto del hecho.
En su declaración indagatoria, Lasi se había declarado inocente, y dijo que mientras estaba por la reserva con la idea de cazar palomas se encontró con Vera y Vilte, quienes estaban borrachos, y minutos más tarde éstos se cruzaron con Bouvier y Moumi y comenzaron a manosearlas.
Luego las llevaron por el monte y unos minutos después salió Vera a pedirle el arma (una carabina calibre 22) a Lasi y a cambio le dio un bolso con la cámara, el celular y una billetera con 200 pesos.
Los imputados llegaron a la Quebrada de San Lorenzo en dos carros del Servicio Penitenciario.
Las dos turistas Cassandre Bouvier (29) y Houria Moumni (20) fueron asesinadas el 15 de julio pasado y sus cuerpos encontrados en pleno monte dos semanas más tarde.
Además de los tres imputados que participaron en la reconstrucción, están detenidas otras tres personas, mientras que otras cuatro están procesadas, pero en libertad.