Por eso la gesta encabezada por el General José de San Martín entre el 19 de enero y el 8 de febrero de 1817 quedó en la historia grande de las campañas militares universales. Con la ayuda de miles de caballos y mulas, los hombres de San Martín partieron de El Plumerillo (Mendoza) y, en 21 días, atravesaron alturas superiores a los 4.000 metros y soportaron una diferencia térmica de unos 40ºC entre el día y la noche para llegar a Chile y enfrentar a las tropas españolas.
Por muchos motivos, pero por este cruce en particular, San Martín se convirtió en un prócer argentino y latinoamericano (aunque Diego Maradona, por la mencionada complejidad, haya puesto en duda la travesía de los Andes). Resulta justo con su figura, por lo tanto, que el cine argentino se haya decidido a recrear la mayor epopeya de San Martín con una producción de una gran magnitud.