Tras el pedido del oficialismo de una sesión especial para el miércoles, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, advirtió esta mañana que si la oposición insiste con las modificaciones que pretende introducir al proyecto oficial de Presupuesto, a las que calificó de «engendros», la Casa Rosada tomará «decisiones que garanticen el modelo» económico. Desde la oposición, Graciela Camaño, alertó que si el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Fellner, autoriza la sesión especial -ya impugnada por la Coalición Cívica- «estaría actuando por fuera del reglamento».
«Es posible que, los enemigos (no digo adversarios) sostengan los engendros q presentaron para pretender condicionar al PE. Que ni lo sueñen. En ese caso tomaremos decisiones que garanticen el modelo definido por CFK y los beneficios conquistados para los argentinos en estos 7 años», publicó hoy Fernández en su cuenta de Twitter.
Así, el ministro confirmó la posibilidad de que la presidenta Cristina Fernández prorrogue el Presupuesto vigente este año si el oficialismo vuelve a fracasar el miércoles en la Cámara de Diputados.
Para ese mismo día, la Comisión de Asuntos Constitucionales citó a los diputados que denunciaron haber sido presionados por el Poder Ejecutivo. La titular del cuerpo, Graciela Camaño, confió hoy en que se pueda «dilucidar» lo ocurrido. Pero la legisladora del peronismo disidente anticipó que si advierte la «comisión de un delito», pedirá directamente que intervenga la Justicia.
La comisión de Asuntos Constitucionales recibirá los testimonios de Elisa Carrió, que denunció el intento del Gobierno de comprar voluntades para la aprobación del presupuesto, y de las diputadas Cyntia Hotton (Valores de mi País) y de Elsa Alvarez (UCR-Santa Cruz).
En tanto, desde el kirchnerismo el diputado Héctor Recalde (presidente de la Comisión de Legislación del Trabajo) reclamó a los denunciantes que «den los nombres de los imputados» en las denuncias por supuestos intentos de sobornos para lograr la aprobación del Presupuesto 2011. «Si hay sospecha por algo, sería bueno que se investigue», sostuvo Recalde, quien estimó que «no puede haber impunidad ni en la denuncia, ni en la acción».
Camaño, en cambio, defendió la decisión de Hotton y Alvarez de mantener por ahora en reserva la identidad de los «altos funcionarios del Gobierno nacional», de «secretarios de Estado» y de otros legisladores que les habrían pedido que se retiraran del recinto en la escandalosa sesión del miércoles pasado.