La referente de la ONG ambientalista Finisterrae, Graciela Ramacciotti, falleció este martes. Desde 1985 en que arribó a la provincia desde su natal Córdoba se dedicó a la defensa de la naturaleza en estado puro. Para ello, creó en 1990 la Asociación Finisterrae, destinada a la defensa del ecosistema fueguino.
Siguiendo estos preceptos, Ramacciotti organizó marchas, campañas públicas y una histórica colección de seis mil firmas, entre otras actividades cuyo objetivo consistía en frenar la amenaza de tala del bosque.
Guía de turismo, docente universitaria y fundadora del Club Amigos de la Montaña entre otros diversos emprendimientos -que incluyen la producción de cortos ecológicos por la televisión local y la publicación de un libro dedicado a difundir textos e imágenes sobre la rica flora austral-, la dirigente ambientalista defendió los árboles nativos no sólo desde un punto de vista sentimental.
“El bosque está presente aquí desde la última glaciación –señalaba en una entrevista-. Es como una piel de la tierra y sustenta toda la diversidad del lugar. Si se acaba ya nada volverá a crecer en su lugar. Es, también, un recurso económico importantísimo que se perdería, algo muy serio en un lugar como Tierra del Fuego, donde los distintos proyectos económicos de desarrollo, desde las empresas electrónicas hasta el petróleo, ya fracasaron. Lo único que parece quedarle a nuestra querida isla es la práctica del turismo responsable, ¿y qué turista se va a interesar en visitar una tierra pelada?”.