Este futbolista es el fiel reflejo del jugador que sueña, que espera, y que a la primera chance se la juega, porque el tren pasa una vez. Así fue como a partir del 2001, las cosas para este delantero nacido en Laprida cambiaron.< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />
Este delantero que dio sus primeros pasos en el Ferro Carril Sud de la ciudad de Tandil, pasó por el Brindisi, Nardó y Vigor Lamezia, de la serie D, donde a fuerza de goles, 59 en casi 90 partidos, pudo saltar a la Serie C-2. El nuevo desafío era el Gallipoli.
Tuvo entonces -y nuevamente- una gran tarea: anotó 40 goles en 55 juegos. Semejante actuación le valió poder llegar a la Serie B y ser “profesional”.
El Pisa, equipo histórico del fútbol italiano, lo incorporó para la temporada 2007/2008 en la principal categoría del ascenso, y el conjunto donde jugara Diego Simeone pegó el salto a la elite, gracias a los 21 goles de Castillo convertidos en cuarenta juegos disputados.
Esa cantidad de conquistas, más su temple y garra hicieron que el delantero, que supo jugar en Huracán de Tres Arroyos, tenga otro reconocimiento, debutar en el Lecce, de la Serie A.
Y ahora, esta temporada, la Fiorentina, el premio mayor.
El “Kaiser” Daniel Passarella, Daniel Bertoni o el mismísimo Gabriel Batistuta son algunos de los ilustres nombres que vistieron la casaca “viola” que se pondrá Castillo a sus 34 años.
La Fiorentina le pagó 900 mil euros para transformarlo en recambio del ex Milan Alberto Gilardino. Tanto sacrificio valió la pena.