El partido que debían jugar este jueves Defensor Sporting, de Uruguay, y Boca Juniors, por los octavos de final de la Copa Libertadores, en Montevideo, fue postergado una semana por cuestiones de seguridad.< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />
La noticia fue dada a conocer hoy por el presidente del club uruguayo, Dante Prato, quien desde Uruguay le confirmó a Télam la información.
El partido de ida por los octavos de final de la Copa Libertadores se disputará el próximo 14 de mayo en el Estadio Centenario y no el 7 en la cancha de Nacional, como estaba previsto.
«El estadio de Nacional es muy pequeño y por razones de seguridad no le íbamos a poder dar más de mil entradas a la parcialidad boquense», afirmó el titular del conjunto uruguayo.
«Nuestro ánimo es poder jugar el partido en el marco de una verdadera fiesta por lo que significa tener a Boca como rival», explicó Prato.
El estadio Centenario no podía ser utilizado este jueves porque al día siguiente habrá un recital de un grupo local, cuyos seguidores se espera que acampen en la previa en los alrededores de la cancha.
Por ese motivo, la dirigencia de Defensor había decidido llevar el partido a la cancha de Nacional, pero aprovechando la suspensión de los partidos de los equipos mexicanos, por la gripe A, tuvieron el aval de la Confederación Sudamericana para postergar una semana el partido ante Boca.
Respecto a lo que podría pensar el entrenador de los «Violetas», Jorge Da Silva, sobre la postergación del encuentro y la posibilidad de que Juan Román Riquelme tenga una semana más para recuperarse de su lesión en la planta de su pie derecho, Prato afirmó: «nos dijo que llevemos adelante la iniciativa».
«Queremos privilegiar la seguridad de todos y para eso Boca tendrá la tribuna Colombres del Estadio Centenario, donde entran 10 mil personas», finalizó.