Las chicas argentinas lucharon, buscaron y en un momento se ilusionaron con empatar, pero no pudieron, aunque deben estar conformes porque dejaron una buena imagen.< ?xml:namespace prefix = o ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:office" />
Las chicas argentinas salieron a jugar ante Canadá con todas sus ilusiones a cuestas, sabiendo que enfrentaban a un rival que es superior, que en los últimos años creció mucho y que llegó a los Juegos Olímpicos de Beijing a buscar una medalla.
Y en el comienzo del partido las chicas dirigidas por José Carlos Borrello intentaron pararse en campo contrario, presionando pero sin generar mucho peligro.
En los primeros 15 minutos Argentina en forma desordenada le generó peligro a Canadá, con centros al área, abriendo bien la cancha pero le faltó profundidad y decisión en los metros finales para poder sacar provecho de las situaciones que provocó en el área rival.
Las canadienses de a poco se fueron afirmando en el campo de juego, pero sólo generando peligro con remates de larga distancia.
Y de esa manera llegó la apertura del marcador, a través de Chapman, quien tomó una pelota fuera del área, a 25 metros del arco, y con un remate bajo al palo derecho estableció la primera diferencia.
A partir de la ventaja, las canadienses comenzaron a manejar los tiempos, a generar más situaciones de gol y pese a que Argentina no se desordenó pudo haberse ido al descanso con un gol más en contra.
Para el segundo tiempo Argentina salió con más decisión, buscando atacar, pero chocó con su impotencia y no supo como entrarle a un rival, que se retrasó pero sin resignar nunca la posibilidad de contraatacar.
Cuando Argentina se quedaba sin piernas y no tenía respuestas futbolísticas llegó el segundo gol de Canadá, marcado a través de un cabezazo de Lang y ahí las esperanzas parecían perderse.
Sin embargo, cuando se acercaba el final del partido llegó el descuento de Argentina, marcado por Manicler, pero no alcanzó y al final fue derrota para las dirigidas por José Carlos Borrello, pero dejando una buena imagen, sobre todo si se la compara con lo hecho en el último mundial de fútbol femenino.
Fuente: Telam