El Congreso está en estado de plena ebullición. Desde mañana, tanto la Cámara de Senadores como la de Diputados, tratarán dos temas de vital importancia para el Gobierno: la aprobación de la reestatización de Aerolíneas Argentinas y el proyecto de movilidad previsional, respectivamente. Todo cambió desde el voto «no positivo» del vicepresidente Julio Cobos que sentenció al fracaso el proyecto oficial de retenciones móviles. La crisis que provocó el conflicto con el campo despertó al Parlamento del largo letargo al que fue sometido por el kirchnerismo, en el que se transformó en una escribanía que únicamente ratificaba los proyectos que enviaba el Poder Ejecutivo. Hoy esto ya no ocurre más. El rechazo a la resolución 125 y las sustanciales modificaciones que debió realizar el Gobierno para dar media sanción a la estatización de Aerolíneas y Austral, le dieron un nuevo aire a los pasillos parlamentarios, que recuperó su protagonismo. Así, desde mañana, en la Cámara baja el oficialismo buscará avanzar en el proyecto de movilidad previsional que impulsa el Gobierno para fijar un aumento por ley en los haberes jubilatorios a partir de marzo del año próximo. La intención del kirchnerismo es lograr entre martes y el miércoles el dictamen favorable en comisión del proyecto que establece una fórmula mixta para la actualización de los haberes jubilatorios que comenzará a regir en marzo próximo. Fuentes parlamentarias no descartaron que si se llega a un consenso amplio con la oposición, el proyecto se pueda debatir esta misma semana en el recinto. De acuerdo al cronograma diseñado por el oficialismo, el proyecto será analizado el martes por la comisión de Previsión Social que preside el kirchnerista formoseño Juan Carlos Díaz Roig y el miércoles ese cuerpo se reunirá con juntamente con la de Presupuesto para avanzar en el dictamen. En el Senado. En tanto, en la Cámara alta, esta semana entra en comisión el proyecto aprobado la semana pasada en Diputados que establece el rescate de Aerolíneas Argentinas y Austral. Así, tras de 17 años de permanecer en manos privadas, la línea aérea de bandera nacional se encuentra a un paso de retornar a manos del Estado. La decisión será del Senado y se estima que se convertiría en ley en poco más de 10 días. El texto -que desde mañana ingresa en comisión – tuvo varias modificaciones, lo que permitió al oficialismo reunir un nivel de consenso pocas veces visto en la gestión kirchnerista a la hora de debatir un proyecto polémico y conflictivo. El primer paso fue retirar del proyecto el acta acuerdo que suscribió, el mes pasado, el polémico secretario de Transporte Ricardo Jaime, y Marsans, con lo cual le acota al funcionario el margen de maniobra en la negociación para la compra de las compañías. El proyecto será debatido en el recinto en la segunda semana de septiembre y el bloque oficialista da por descontado que obtendrá el respaldo de al menos 41 legisladores, una cifra que supera con comodidad los 37 necesarios para tener mayoría propia. Según un cronograma, todavía provisorio pero en principio acordado con bancadas opositoras, la iniciativa oficialista, que llegó el viernes al Senado, será analizada durante las próximas dos semanas por un plenario conjunto de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Infraestructura, Vivienda y Transporte. Para la primera reunión plenaria del martes venidero, a las 15, fue citado el secretario de Transporte y en los encuentros siguientes de miércoles y el jueves tendrán voz los dirigentes de los siete gremios aeronáuticos y una lista todavía indeterminada de técnicos, expertos y funcionarios. En la primera semana de septiembre, las mismas comisiones volverán a encontrarse el martes y el miércoles y, según como hayan evolucionado las discusiones, los dictámenes llegarán al recinto el jueves 4 o, en su defecto, el siguiente miércoles 10. El oficialismo, que lidera Miguel Pichetto, promoverá la aceptación del texto sancionado por Diputados, en un intento de evitar que deba volver a la Cámara baja y en el convencimiento que la distancia de votos que obtuvo respecto de los opositores (167 afirmativos a 79 negativos) anticipa un clima de opinión general favorable a la propuesta oficial. En las comisiones de Presupuesto y Hacienda y de Infraestructura, Vivienda y Transporte, que lideran respectivamente el correntino Fabián Ríos, Eric Calcagno y Maillman, el kirchnerismo tiene garantizado los 8 votos que les da quórum propio para deliberar y la mayoría para suscribir el dictamen que llegará primero al recinto. Los principales referentes de la bancada kirchnerista confesaron a DyN que recibieron con alivio la eliminación de los dos puntos más controvertidos del proyecto oficial del Gobierno de Cristina Fernández: la eliminación del acta-acuerdo firmado con el grupo Marsans y la intervención del Congreso en la fijación del precio de compra de las acciones de las aerolíneas.
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El Senado comenzará a discutir la reestatización de Aerolíneas
Será desde esta semana; en tanto, Diputados analizará el proyecto del Poder Ejecutivo sobre movilidad previsional.