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Reconstruyen la Escuela 38 en la Antártida

El edificio de la única escuela en el continente blanco se incendió en el año 2007 por fallas en la calefacción. Un año y medio después inician su reconstrucción. El nuevo establecimiento albergará a unos 20 alumnos.

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Comenzaron los trabajos de reconstrucción de la escuela N° 38 “Presidente Julio Argentino Roca” en la Base Esperanza de la Antártida Argentina, que albergará a unos 20 alumnos a partir del inicio del ciclo lectivo 2009, en un espacio acorde con las actividades escolares que abarcará una superficie de 187 metros cuadrados. El futuro edificio reemplazará al anterior, que se incendió en julio de 2007 por una falla en la calefacción.

Los trabajos de movimiento de suelo y levantamiento de las primeras columnas se iniciaron la semana pasada tras el arribo al Continente Blanco de un contingente de 20 obreros del Ejército, entre ellos un arquitecto.

En tanto, a las 13.45 de hoy arribó a < ?xml:namespace prefix = st1 ns = "urn:schemas-microsoft-com:office:smarttags" />la Antártida el buque que transportaba los paneles y la mayor parte de lo que será la estructura de la escuela, que será construida mediante sistema modular y demandará una inversión total de 1.465.000 pesos.

“El nuevo establecimiento contará con sistema de calefacción centralizada por caldera, aulas, una biblioteca y, también, los muebles. Será un edificio moderno y, para nosotros, espléndido”, detalló el docente antártico Gustavo Lescano quien, junto a su esposa, trabajó en la propuesta escrita del nuevo establecimiento que el Gobierno de Tierra del Fuego presentó ante Nación para su aprobación.

El docente recordó que en marzo de 2008, tras el incendio de la escuela, “nos encontramos con una casita que no era más que una habitación totalmente vacía en muebles” y contó que “a partir de ese momento empezamos a acondicionar el lugar para el inicio de clases; de hecho vaciamos la cocina y allí armamos una sala de informática”, dijo.

Sin embargo el lugar seguía siendo “chico e incómodo” para el desarrollo de las actividades escolares porque “en una habitación entraban 4 alumnos y en otra 2, y además la acústica no era buena”, amplió el maestro.

A lo largo de 2008, mientras desempeñaba su tarea docente, el matrimonio comenzó a diagramar el proyecto en forma conjunta con el ministerio de Educación de la Provincia, basándose en la “imperiosa necesidad” de contar con un espacio en condiciones de recibir a una mayor cantidad de niños en 2009.

“Empezamos a mandar informes escritos al ministerio de Educación y a la Supervisión General de Escuelas alertando que la construcción del nuevo edificio debía ser sí o sí para este año porque la matrícula era bastante y no iban a entrar todos”, comentó Lescano.

“Al poco tiempo nos enteramos que los informes fueron tenidos en cuenta por Nación y que se aprobaron –el convenio tripartito entre los gobiernos nacional y provincial y el Ministerio de Defensa se rubricó el 29 de septiembre último-” expresó el docente.

“Sentimos un gran orgullo y una alegría muy importante al ver que se está trabajando sobre las ruinas de la escuela anterior y sabiendo que junto al Gobierno provincial escribimos la primera letra para poder tener el establecimiento”, se emocionaron Lescano y su esposa, Rosa de los Angeles Soto.

“En las fotos queda resumido todo lo que deseamos decir; recordamos aquel primer mail que enviamos en el que expresábamos la necesidad de reconstruir un nuevo edificio escolar en la Base. Nos pone muy contentos contarles y mostrarles en fotos el inicio de esta gran obra”, dijeron.

Tras un año de docencia en la Antártida Argentina, en los próximos días Lescano y Soto retornarán a su lugar de origen abriendo camino a los nuevos maestros designados para continuar con la tarea educativa, y “con la satisfacción del deber cumplido”.

(Fuente: Prensa gobierno TdF)